Hoy empezamos una serie de posts donde trataremos los principales temas a tener en cuenta para lanzarse a la red y montar nuestro negocio online. Ya sea porque desarrollamos la tienda desde cero o porque nos hemos decidido a mover (o compaginar) nuestro comercio tradicional a la red. Y dentro de todos los temas que consideramos imprescindibles dada nuestra experiencia en el eCommerce, hemos decidido comenzar con algo que quizá sea demasiado obvio: elegir el catálogo de productos más adecuado para salir a la red. Ya sabéis que las cosas más obvias son las que menos tenemos en cuenta cuando nos dejamos llevar por la ilusión y por el pensamiento poco racional, por lo que nunca está de más empezar por lo básico.
Antes de pensar en el control de stocks o en los almacenes, hemos de decantarnos por el estilo y tipo de productos que pondremos a la venta. Esto, unido al posterior almacén de dichos productos, será lo que guíe nuestra necesidad de inversión inicial, teniendo en cuenta que hoy en día podemos encontrar muchos proveedores que nos ofrecen un servicio de «Drop Shipping» (entrega directa desde el proveedor al cliente final), lo que hace que preocuparnos del stock pueda ser cosa del pasado. Si apostáramos por esta fórmula sería, obviamente, algo más fácil empezar la andadura por el terreno online.
Siguiendo con el tema de la elección de productos, base para la oferta de cualquier tienda (online incluida), tendremos que valorar todas las opciones en su conjunto adecuándolas a nuestra capacidad empresarial, conocimiento y oportunidades de éxito, necesitando tener en cuenta el nivel de precios, la cantidad de productos que tendremos que adquirir (si se trata de Drop Shipping podríamos obviar esta parte) y que cada uno de los artículos elegidos tenga, como ya hemos dicho, opción de triunfar. También es muy importante analizar que la gama que ofrecemos sea suficientemente amplia y concreta como para que el posible cliente perciba que se encuentra delante de las las principales alternativas y no tenga la tentación de ir a buscarlas a otro sitio.
En esta primera etapa dentro del proceso de abrir una tienda online hay que recopilar toda la información que podamos y armar nuestro catálogo con los productos y proveedores seleccionados en base a las siguientes preguntas, recopiladas siguiendo nuestra propia experiencia:
- ¿Qué productos pueden ser interesantes?
- ¿Hay mucha competencia en el sector al que pretendemos apuntar?
- ¿Son vendibles los productos seleccionados a través del canal?¿Hay mucha competencia? ¿Y en el terreno offline tradicional?
- ¿Poseemos una gama suficiente como para competir con el resto de tiendas en internet y que el futuro cliente perciba que somos la mejor opción a considerar?
- ¿Cómo estamos de precio?
- ¿Somos competitivos teniendo en cuenta el coste total del pedido (gastos de envío, suplementos por métodos de pago, impuestos…)?
- ¿Qué condiciones nos dan los futuros proveedores? ¿Plazos de entrega? ¿Pedidos mínimos? ¿Disponen de herramientas digitales que faciliten la gestión del catálogo de productos (carga de ficheros, gestión de precios dinámica, fotos de producto….)?
- ¿Qué margen de venta nos quedará?
- ¿Qué productos sustitutivos hay?
Son preguntas complejas a las que, en ocasiones, no encontraremos respuestas subjetivas. Pero será el primer ejercicio para plantear el objetivo comercial de nuestro comercio. Os recomendamos en este primer germen del proyecto que observéis lo que hacen las demás tiendas online, que visitéis las ferias del sector en el que pretendéis moveros, que habléis con todos los posibles proveedores y, sobre todo, que paséis a elaborar vuestro primer catálogo de productos. Aunque en un principio sea experimental. En este punto, podéis realizar la primera investigación utilizando agregadores de internet, siendo el de Google Shopping el más recomendable en España. Aquí, tendréis una comparación de productos y comerciantes, clave para futuras actuaciones.
Hay que evitar que la ilusión y el pensar que todo se vende por internet nos hagan pasar de puntillas por esta primera etapa. Somos comerciantes y debemos de ofrecer una oferta interesante a nuestros posibles clientes para que nos compren. Pero no sólo es trascendente esta oferta, también está la marca, la experiencia de compra, el servicio post venta y otros factores que conseguirán que dichos clientes hablen bien de nosotros, algo que marca la diferencia entre una tienda online con tendencia al fracaso o al éxito. Pero vale la pena reflexionar en el tema tratado hoy antes de que continuemos, programando los siguientes pasos en la apertura y gestión de una tienda online para futuras entregas. Seguid nuestro blog para recibir todos nuestros consejos, esperamos que os sean tan útiles como nos lo han sido a nosotros.
Segundo paso para abrir una tienda online ->
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